Intento encerrarme en una oscura habitación, olvidar todo el dolor que mi cuerpo recorre.
Sonrío fríamente cada vez que me miras, grito cuando apartas tu estúpida mirada.
Aparento la felicidad que tanto te gusto.
Finjo estar bien delante de todos, mientras que mi mundo por detrás se cae. El cristal que protegía mis pequeños deseos se deshace, mis sueños se caen perdiendo sus alas puras.
Me pregunto la razón de esta estúpida sensación, ¿Es solo el camino o también es otra cosa?
Juré estar bien a un mañana, mas ¿cuándo saber si ha llegado? Dudo del mundo que me rodea, extrañada miro a la gente. ¿Dónde estoy? ¿Por qué estoy donde estoy? ¿Quiénes son ellos? Estoy sola rodeada de gente. Sola. Verdaderamente sola.
Cierro los ojos, nada volverá a ser como antes, lo sé. Aún así intento que todo sea perfecto, intento que el mundo siga en silencio. En la penumbra de una habitación una nota suena. Solitaria. Tranquila. ¿Quién se va a ser cuenta? Nadie oye, nadie escucha. Por muy alto que hable, pida, rece... Mis lamentos jamás serán escuchados.
¿Y que pedir en esta oscura noche?
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